
08 Oct Acercar la realidad a la escuela. “Una carta, una sonrisa”
Una función importante de la escuela es ser una herramienta de bienestar social. Esta función implica un trabajo diario de maestros y de toda la comunidad educativa. A través del esfuerzo diario, la escuela puede pasar a ser una pieza fundamental en la prevención de posibles riesgos sociales. Es por ello que la enseñanza debe implicarse en la realidad del alumnado y tratar las problemáticas que encontramos en nuestro día a día.
Escuchar sus preocupaciones y solucionar algunas de sus dudas puede ayudar a los niños/as a entender mejor el mundo y lo que ocurre a su alrededor. De esta manera, también empiezan a comprender de qué forma pueden utilizar las herramientas que están aprendiendo en la escuela.
En esta ocasión, el equipo de profesorado se ha implicado en una iniciativa llevada a cabo para colaborar con la catástrofe que está teniendo lugar en La Palma.
A través de varias sesiones, las profesoras del centro han tratado con los alumnos qué es lo que está ocurriendo en la Palma y como está afectando a muchas familias y comunidades este desastre natural. Además de trabajar las herramientas comunicativas y entender la realidad de muchas personas, el claustro de profesores ha aprovechado esta oportunidad para hacer énfasis en nuestro proyecto de educación emocional e intentar colaborar de alguna manera con lo que está sucediendo.
Para ello, el centro Dolores Ramos se ha unido a la iniciativa “Una carta, una sonrisa”. Una vez tratado el tema en el aula y los alumnos/as comprendieron la seriedad de la situación, han trabajado conceptos como la empatía y la solidaridad. Hemos discutido sobre cómo podríamos sentirnos nosotros si esa fuera nuestra realidad y cómo nos afectaría no tener una escuela a la que asistir o no poder ver a nuestros amigos/as y allegados/as.
Pero la pregunta que nos hemos hecho ha sido, ¿cómo podemos ayudar? Hemos recogido ideas muy interesantes y opiniones creativas pero finalmente decidimos realizar un dibujo para que a su vuelta a la escuela los niños/as de La Palma se sintieran arropados y queridos por muchos niños/as de España.
Además, los niños han querido transmitirles sus mejores deseos, entre los que estaban: que pronto tengáis casas nuevas, que podáis volver pronto al cole, que vuestros deseos se cumplan, que pronto se duerma el volcán, que no tengáis miedo y que vuestras familias estén bien.
Nos sentimos muy agradecidos como comunidad por haber participado en esta iniciativa y observar cómo nuestro granito de arena puede alegrar a otras personas.
Hemos sentido como grupo que juntos podemos ser más fuertes. ¡Estamos impacientes porque nuestras cartas sean recibidas y provoquen muchas sonrisas allá donde lleguen!